Los supervivientes de un ictus a menudo experimentan debilidad en las extremidades inferiores y pie caído, lo que puede afectar a su movilidad y recuperación. En PrimeCare, ofrecemos dispositivos ortopédicos personalizados que proporcionan estabilidad, mejoran la marcha y ayudan en la rehabilitación del ictus. Nuestras plantillas ortopédicas para accidentes cerebrovasculares están diseñadas para mejorar la velocidad de la marcha, corregir deformidades y promover un posicionamiento adecuado para ayudar en el proceso de recuperación de los pacientes con accidentes cerebrovasculares.
¿Qué es un ictus?
Un ictus se produce cuando se interrumpe el flujo sanguíneo cerebral, ya sea por la obstrucción de una arteria (lo que se conoce como ictus isquémico) o por la rotura de un vaso sanguíneo (lo que se conoce como ictus hemorrágico). Esta interrupción corta el suministro de oxígeno y nutrientes al cerebro y provoca la muerte de las células cerebrales. La gravedad y la localización del ictus determinan la gama de efectos, que pueden incluir desde trastornos menores hasta daños potencialmente mortales.
Estadísticas sobre el ictus: Prevalencia e impacto
Cada año, más de 795.000 personas sufren un ictus en Estados Unidos, y alguien lo sufre cada 40 segundos. El ictus es una de las principales causas de discapacidad grave a largo plazo, que afecta significativamente a la movilidad y la vida cotidiana. Para muchos supervivientes de ictus, en particular los que sufren debilidad en las extremidades inferiores o pie caído, los dispositivos ortopédicos pueden desempeñar un papel crucial en la rehabilitación del ictus y mejorar la calidad de vida en general.
Causas del ictus: Factores clave que hay que conocer
Los accidentes cerebrovasculares se clasifican principalmente en dos grandes categorías:
Accidentes cerebrovasculares isquémicos
Son las más frecuentes y se deben a la obstrucción o estrechamiento de las arterias cerebrales. Las causas incluyen:
- Coágulos de sangre, a menudo del corazón
- Aterosclerosis (depósitos de grasa en los vasos sanguíneos)
- Factores de riesgo: fibrilación auricular, trastornos de la coagulación
- Posible relación con la infección por COVID-19 (requiere más investigación)
Accidentes cerebrovasculares hemorrágicos
Se producen cuando un vaso sanguíneo cerebral se rompe o tiene una fuga. Los desencadenantes son:
- Hipertensión no controlada
- Lesiones en la cabeza
- Aneurismas
- Uso excesivo de anticoagulantes
- Angiopatía amiloide cerebral
- Malformaciones arteriovenosas (MAV)
Nota: En ocasiones, un ictus isquémico puede derivar en un ictus hemorrágico si la presión vascular aumenta demasiado.
Ataque isquémico transitorio
También hay una tercera afección llamada accidente isquémico transitorio (AIT) o "miniaccidente cerebrovascular". Se trata de una reducción temporal del flujo sanguíneo al cerebro que provoca síntomas breves. Aunque no causan daños duraderos, los AIT son graves señales de advertencia de un mayor riesgo de ictus en el futuro y requieren atención médica inmediata.
Reconocer los síntomas del ictus: El tiempo es crítico
Reconocer rápidamente los síntomas de un ictus es vital, ya que la atención médica inmediata puede mejorar mucho los resultados. Entre los principales signos que hay que tener en cuenta se incluyen:
- Entumecimiento o debilidad repentinos en un lado de la cara, el brazo o la pierna.
- Dificultades en el habla (arrastrar las palabras, problemas para hablar o entender).
- Problemas repentinos de visión (visión borrosa, visión doble)
- Dolor de cabeza intenso inexplicable, a menudo con mareos o problemas de equilibrio.
Para evaluar un posible ictus, utilice el método FAST:
F - Cara: Compruebe si la sonrisa es desigual.
A- Brazos: Compruebe si uno de los brazos desciende cuando los dos están levantados.
S - Habla: Si al repetir una frase sencilla el habla es arrastrada o inusual.
T- Hora: Llame inmediatamente a los servicios de emergencia si se presenta algún signo.
Actuar con rapidez es crucial para minimizar el daño cerebral y aumentar las posibilidades de recuperación.
Factores de riesgo de ictus: ¿Qué aumenta su riesgo?
Los factores de riesgo de ictus pueden clasificarse en opciones de estilo de vida y afecciones médicas, y muchos de ellos son controlables.
Factores relacionados con el estilo de vida:
- Obesidad
- Sedentarismo
- Consumo excesivo de alcohol
- Consumo de drogas ilícitas (por ejemplo, cocaína, metanfetamina)
Condiciones médicas:
- Hipertensión
- Colesterol alto
- Diabetes
- Enfermedades cardíacas (por ejemplo, insuficiencia cardíaca, fibrilación auricular)
Otros factores de riesgo significativos:
- Tabaquismo (incluida la exposición pasiva)
- Antecedentes personales o familiares de ictus, infarto de miocardio o accidente isquémico transitorio.
- Edad (mayor riesgo a partir de 55 años)
- Raza/etnia (mayor riesgo para afroamericanos e hispanos)
- Sexo (mayor riesgo en los hombres, pero mayor mortalidad en las mujeres)
- Factores hormonales (píldoras anticonceptivas, terapias con estrógenos)
- Infección por COVID-19, casos especialmente graves
Diagnóstico de un ictus: Cómo se hace
El diagnóstico del ictus implica una combinación de evaluación neurológica y diagnóstico por imagen avanzado.
Evaluación neurológica:
- Los médicos comprueban el habla, el movimiento y la coordinación
- Identificar anomalías relacionadas con el ictus
Pruebas de imagen:
- Tomografía computarizada o resonancia magnética
- Se utiliza para confirmar el diagnóstico y determinar el tipo de ictus
- Revelar obstrucciones o hemorragias cerebrales
- Orientar las decisiones de tratamiento
Pruebas suplementarias:
- Puede incluir análisis de sangre y un electrocardiograma (ECG).
- Ayudar a identificar las afecciones subyacentes que contribuyen al ictus
Este enfoque integral permite un diagnóstico rápido y preciso, lo que significa que es posible un tratamiento rápido y eficaz.
Opciones de tratamiento del ictus: Cuidados inmediatos y recuperación a largo plazo
Las estrategias de tratamiento del ictus varían en función del tipo y la gravedad.
Accidente cerebrovascular isquémico
Objetivo principal: restablecer rápidamente el flujo sanguíneo cerebral
Métodos:
- Fármacos trombolíticos para disolver coágulos
- Procedimientos con catéter para la eliminación de coágulos
Accidente cerebrovascular hemorrágico
Enfoque: Controlar la hemorragia y reducir la presión cerebral
Enfoques:
- Gestión de la presión arterial
- Mejora de la coagulación
- Posible intervención quirúrgica para aliviar la presión
Cuidados posagudos
Énfasis en la rehabilitación.
Puede incluir:
- Fisioterapia para la recuperación del movimiento
- Logopedia para problemas de comunicación
- Dispositivos ortopédicos para facilitar la movilidad y la marcha
La fase de rehabilitación es crucial para mejorar la independencia y la calidad de vida de los supervivientes de un ictus.
Ortesis para la recuperación del ictus: Mejora de la movilidad y la estabilidad
Para los pacientes que han sufrido un ictus, los dispositivos ortopédicos desempeñan un papel crucial en el proceso de rehabilitación, ya que les proporcionan apoyo mientras trabajan para recuperar la movilidad. Las órtesis de tobillo-pie(AFO) y las órtesis de rodilla-tobillo-pie(KAFO) se utilizan habitualmente para tratar la debilidad de las extremidades inferiores, la caída del pie y la inestabilidad de la rodilla, afecciones frecuentes en la recuperación del ictus. Las AFO ayudan a levantar el pie al caminar, evitando tropiezos y caídas, mientras que las KAFO ofrecen apoyo adicional estabilizando la articulación de la rodilla, lo que permite un movimiento más seguro y eficiente.
Las órtesis proporcionan estabilidad al alinear las articulaciones y compensar la debilidad muscular, lo que es esencial para mejorar la mecánica de la marcha y la movilidad general. El uso de un dispositivo ortopédico poco después de un ictus también puede prevenir deformidades, controlar la espasticidad y reducir el gasto de energía necesario para caminar. Adaptados a las necesidades de cada paciente, estos dispositivos forman parte integrante de un plan de rehabilitación integral y ayudan a los supervivientes a lograr una mayor independencia y una mejor calidad de vida.